¿Conoces a Jesucristo personalmente?
Solo podemos conocerlo entregándole nuestra vida.
1. ¿Le has entregado la tuya?
La Biblia nos enseña que “todos” somos pecadores y nuestros pecados nos separan de Dios.
a) Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23)
b) Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro (Romanos 6:23)
c) Que si confesares con tú boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tú corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo (Romanos 10:9-10)
2. Acepta a Jesús.
Si has entendido y quieres aceptar a Jesús como tu Señor y Salvador, dile:
Dios, se que soy pecadora y me arrepiento de mis pecados. Entiendo que la salvación no es por obras, sino depositando mi confianza en Jesucristo y su obra en la cruz. Creo que Jesús murió y resucitó para el perdón de mis pecados. Te entrego mi vida, invito a entrar a mi corazón, y ser el Señor de mi vida. Gracias por amarme y morir por mi. En el nombre de Jesús, Amén.
Queremos orientarte. Si le acabas de entregar tu vida a Jesucristo haciendo la oración anterior, llena el siguiente formulario:
3. ¿Y Ahora Qué?
1. Confiésalo a otros (Lucas 19:40)
2. Ora y lee la Biblia diariamente (Salmos 119:105)
3. Congrégate (Hebreos 10:25)
4. Bautízate (Hechos 2:41)
5. Rodéate de amistades cristianas (Salmos 133:1)