«¿Hasta cuándo, Señor, he de pedirte ayuda sin que tú me escuches?» (Habacuc 1:2ª)
Cuantas veces se presentan situaciones en nuestra vida en las que hacemos la pregunta que Habacuc le hizo al Señor en su momento. Cuando no hay esperanzas de salud, cuando un hijo esta descarriado, cuando las esperanzas de ser madre se tornan remotas, cuando hay un esposo alcohólico y abusivo, nuestra fe decae y todo se torna oscuro. En estos momentos debemos de creer que:
- El Señor es especialista de crear de la nada.
- Dios es capaz de cambiar situaciones imposibles en posibles.
- Aunque todo este al revés Dios está en control.
- Aunque pase toda posibilidad humana, Dios va a obrar a nuestro favor tal como prometió.
Quizás tu estás enfrentando ahora una decisión crítica y no sabes qué camino tomar. O tal vez has estado orando por un asunto, pero Dios no te ha respondido. Se trata de una situación difícil o dolorosa que te está consumiendo.
El momento de espera es el que determina el tamaño de nuestras bendiciones. El Señor es fiel y va a responder a su debido tiempo aunque pensemos que es muy tarde. Aunque no lo veamos, él está trabajando y lo está haciendo a nuestro favor para darnos la victoria.
Solo confía en él, y él hará.
Oración: En este momento de crisis, solo Señor Te doy gracias porque me aferro a que Tú tienes planes de bien y no de mal para mi vida. Confío en que Tu mano poderosa me acompaña, y lo que tienes para mí, es mucho mejor. En Cristo Jesús, amén.
Alabanza: Al Final, LGoodman – http://www.youtube.com/watch?v=TKJ8GD8KefU
Keila Matos para Maestras del Bien ©2017 -Derechos Reservados www.maestrasdelbien.org -Originalmente publicado 12-5-13